Jordan Ayew.

Hola a todos, muchas veces hemos escuchado la tan famosa cita “de tal palo, tal astilla”, que hace referencia a la herencia genética que un padre deja a su hijo. En este artículo, la cita nos viene de perlas para ver el curioso caso de esta familia ghanesa. Todos los amantes del fútbol conocemos de sobra el nombre de Abédi Pelé, probablemente el mayor exponente del fútbol africano en toda su historia. Jugador que en los años 80 y 90 ganó un sinfín de títulos tanto a nivel nacional, internacional e individual. Ganó 3 balones de oro como mejor jugador africano representando al club en el que se hizo grande, el Olympique de Marsella. Pues bien, parece que la historia de esta familia está ligada enormemente al club francés, y es que si Pelé le debe gran parte de sus éxitos al club de la Boca del Ródano, sus hijos no iban a ser menos. El mayor, André Ayew, es sin duda alguna el jugador más decisivo de un Olympique de Marsella que no lo está pasando nada bien esta temporada en la máxima categoría, pero que sin embargo se ha convertido en uno de los equipos con mejores resultados de la fase de grupos de la UEFA Champions League. Casi una veintena de goles en menos de dos temporadas con el club francés le han llevado a ser uno de los estandartes no solo de la actual plantilla, sino también de una selección que cada vez tiene más fuerza a nivel mundial, Ghana. Pero lo de los Ayew no queda aquí, ya que desde hace algo menos de una temporada viene pisando muy fuerte desde atrás otro miembro de la familia, el hermano menor y a quien va dirigido este artículo, Jordan Ayew, de 20 años de edad.

Nacido el 11 de Septiembre de 1991 en Marsella, Francia. Aunque nació en la ciudad donde su padre se hizo grande, sus raíces africanas lo han llevado a nacionalizarse con Ghana, por lo que a la hora de representar futbolísticamente a un país, decidió hacerlo con las estrellas negras ghanesas, al igual que su hermano y su padre. Criado en la cantera del Olympique de Marsella, Jordan ha mamado desde chico la esencia de la entidad de la Costa Azul, pasando y subiendo por sus categorías inferiores hasta debutar en el primer equipo. Y lo hizo en Septiembre de 2009, ante el Lorient y además marcando el día de su debut. La temporada pasada fue cuando empezó verdaderamente a entrar en los planes del ex-campeón del mundo Didier Deschamps. Llegó a contar con más de 1000 minutos entre todas las competiciones, marcando 2 goles y dando 4 asistencias, uno de sus puntos fuertes. Esta temporada sigue por el mismo camino, aunque obteniendo un mayor número de minutos por partidos, además, ya ha debutado como internacional absoluto con los Black Stars. Esperemos que siga haciéndose como futbolista y pronto atraiga el interés de los equipos top de Europa, tal y como lo está haciendo ahora su hermano André, desde luego, tiene en quien fijarse.

Jordan Ayew es un atacante diestro que puede actuar como mediapunta o como “falso delantero centro”, ya que suele jugar algo escorado en banda, sobre todo en la derecha, y desde ahí partir hacia dentro. Al igual que su hermano, Jordan también destaca por ser un trabajador nato, un futbolista con muchísima movilidad y dotado de un dinamismo incansable. Suele moverse por todo el frente de ataque, le gusta caer a bandas para abrir el juego y en menor medida, situarse entre los centrales para pelear los balones que lleguen al área contraria. También se asemeja muchísimo a su hermano a la hora de tirar los desmarques o pelear con los defensores rivales, ya que sabe ganar muy bien la posición y es muy listo en este tipo de jugadas. Rápido y con bastante calidad técnica, tiene una gran capacidad para desequilibrar en el uno contra uno y también muchísima facilidad para asistir a sus compañeros. Además, tiene un físico bastante aceptable, con una altura de 1,82 metros, que le hace no ser especialmente vulnerable a la hora de ir al choque. Hasta el momento me está pareciendo un jugador con grandes cualidades y Deschamps cada vez confía más en él, eso si, como asignatura pendiente le pondría mejorar su faceta goleadora, si bien es joven para ello, pero debe intentar con mayor asiduidad el disparo a puerta, será cuestión de tiempo y confianza que lo consiga.